miércoles, 25 de mayo de 2011

UNA AFICIÓN “ESCALIBADA”.


Después del último partido de liga contra el Atlético de Madrid en el que el Mallorca se jugaba la permanencia en primera división con solamente conseguir un empate, cualquiera se puede haber dado cuenta de varias cosas.

En primer lugar que hay afición. La afición del Mallorca está ahí, porque llenó el campo y animó al equipo como nunca. ¿Porqué no acude domingo tras domingo a Son Moix?. Ah, amigo, esto ya es harina de otro costal aunque no hace falta ser muy listo para verlo. Esta afición se da perfectamente cuenta que está siendo engañada año tras año por los dirigentes del Club y por lo tanto la mayoría va al campo solamente para ver determinados partidos o cuando se le ofrece un buen aliciente para acudir.

Hay como es lógico otros aficionados que acuden asiduamente al campo. Algunos aún están convencidos de que el Club es de ellos, de los socios,  y por lo tanto se creen que tienen la obligación de apoyar, ayudar, animar, sufrir y desesperarse con el equipo. No se dan cuenta de que al ser el Mallorca SAD ahora una empresa y pertenecer a un dueño, es el propietario el que tiene que ofrecer a los aficionados un buen producto, en este caso un buen espectáculo, que sea un aliciente para que todos podamos acudir al estadio para disfrutar. No al revés. El problema económico que dicen tiene el Club no cabe revertirlo en la afición. Un propietario ha comprado el Club, se ha gastado un dinero y evidentemente está en su derecho de quererlo recuperar y además buscar por todos los medios que su empresa le genere beneficios. Nadie compra para perder dinero.

Pero a lo que íbamos. Hay afición y muy buena. El domingo se demostró y eso debería hacer reflexionar a la propiedad del Club. El domingo se vio la impotencia que tenían los jugadores para lograr ese punto que les iba a dar la permanencia. Donde no hay, que no busquen. El público se dio perfecta cuenta de ello. Pero quería que el equipo se quedara en Primera y por eso les animó durante todo el encuentro, cuando en realidad al ver que el equipo no respondía a las expectativas creadas debió demostrar su disconformidad con ellos, contra el cuadro técnico y sobre todo contra la propiedad del Club que es la principal responsable de formalizar los descartes y fichajes cada temporada. Eso no ocurrió. La gente quiere al equipo en Primera, eso quedó demostrado y lo que no puede ser es creer en lo que la propiedad les dice siempre de que no hay dinero, que se trata de un Club pequeño, que no se pueden pagar sueldos millonarios, que hay que incorporar a chavales jóvenes o desconocidos para que despunten y  así luego se puedan vender para generar beneficios...

No hay dinero... pero sin embargo el propietario ingresa unos buenos dividendos cada temporada con el traspaso de los jugadores que han destacado. No hay dinero y por eso se vuelven a fichar jugadores desconocidos y baratos esperando se les pueda sacar el provecho económico que se busca con ellos. No hay dinero pero se quiere construir un nuevo estadio. No hay dinero pero se acude a hoteles de 5 estrellas para las concentraciones…

Consideramos que no se puede manejar a la afición como la propiedad la está manejando. No se lo merece. En política lo que ocurrió el domingo haría que los responsables “tomaran nota” de lo ocurrido. Existe mucha afición, se vio el domingo,  lo que ocurre es que está descontenta, desmotivada y “escalibada”. Que los propietarios cambien de estrategia y ofrezcan a la misma buenos alicientes para ir al campo y verán como se llena domingo tras domingo.

Ya se ha demostrado. 




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